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jueves, 23 de septiembre de 2010

Media Maratón de Valladolid 2010

Como tantas otras veces, me presentaba en la linea de salida con la confianza de que hoy sería mi dia. Bajaría de 1:50 sin aparente esfuerzo. Quizás esta vez el entrenamiento está siendo el más serio de todos, con tiradas largas o muy largas y siempre a ritmo (debajo de 6 min el km) y con mucha pista, repeticiones a ritmos entre 4:45 y 4:35 con distacias de entre 1600 y 2000 m.
Decidí salir con Javier a ritmo de 5min el km. Ya lo intenté en La Latina y el porrazo fue brutal. Sin embargo esta vez las sensaciones eran distintas. No iba sobrado, pero tampoco necesitaba frenarme ibamos tranquilamente con unos segundos de margen. Yo esperaba el km 10 deseoso para saber como estaba, pero las sensaciones en el km 6 (supongo que había calentado ya) eran tan buenas que empezaba a creermelo. En cada avituallamiento mordía media pastillita de glucosa (dextro) y parecí que funcionaba todo bien. Ir con Javier me ayudaba mucho para que el ritmo no decaiera. Pasamos el km 10 en 50:50 y es que el gps ya nos indicaba que llevábamos unos 200 metros más de lo que marca la carrera, lo cual es normal ya que nunca haces el recorrido exacto de la medición. Estos km pasaron muy rápidos a pesar de que los picábamos entre 5:05 y 5:10; a partir del km 14 aumentamos el ritmo a 4:50, yo flipaba. Pensaba que en cualquier momento llegaría la fatiga general, la flojera...un pajarón....pero nada de nada. Ibamos adelantando a la gente y empezaba a ser consciente de que iba a rebajar mi marca un montón acercándome a 1:45. En el km 17 Javi me dice que va a apretar hasta 4:30 el km, yo me acojono y me quedo, prefiero amarrar lo conseguido. Javi va poco a poco alejándose. Yo aprieto y consigo que no se marche mucho. Sobre el km 18 había un avituallamiento, donde decido beber y tomar más glucosa, y aquí Javi se aleja bastante. Vuelvo a coger el ritmo y voy marcando siempre por debajo de 5 el km. A esas alturas no paro de adelantar a gente, y eso me hace pensar que voy aún más rápido. El útimo km me lanzo de cabeza y  a pesar de tener el unico repechito de la carrera vuelvo a picar el km por debajo de 5. La entrada en meta la hago esprintando, viendo en el crono que no sería sub 1:45 pero si sub 1:46. Al final 1:45:53. Impresionante. No acabo nada reventado (comparándolo con cualquier otra media) pero sobre todo me sorprende lo rápido que me recupero, en apenas unos minutos me encuentro genial (dentro de un orden y siempre comparando con otras medias en las que acabo roto).
Esta ha sido sin duda mi mejor carrera. Javi entro un minuto antes que yo y Julián acabó en 1:51 también con grandes sensaciones y corriendo de menos a más.
Las causas son claras, entrenar con ritmos controlados siempre y metiendo tiradas muy largas (dos de 30 km) han dado su fruto. Las sensaciones en carreras eran muy similares a las de los entrenamientos en pista. Esto supone un respaldo total al plan que estams siguiendo Julián y yo, y me anima a seguir más fuerte aún.
En el plan corro 4 dias a la semana, de los cuales uno es de tirada larga (entre 20 y 30 km) por debajo de 6 min el km, y otro de series de entre 1600 y 2000 m  (unas 4 o 5 repeticiones con recuperaciones al trote entre 200 y 400 metros); los otros dos dias, uno vuelvo a la pista y hago entre 5 y 8 km a ritmo inferior a 5 min el km, con calentamiento y enfriamiento al final; el cuarto dia es una salida al trote de entre 6 y 8 km a ritmo en torno a 5:45 (este es el dia que sacrifico, si no tengo más remedio).
La carrera era perfecta para hacer marca. El clima era inmejorable y el recorrido plano. Dimos tres vueltas, una pequeña y dos grandes. Eso ayuda porque sabes lo que viene al final, a pesar de que pueda parecer monótona, en mi opinión si tu objetivo es correr mucho es lo mejor. Si quieres correr algo menos quizá sea preferible no repetir recorrido y así conoces más zonas de la ciudad. Pero para eso recomiendo correr Segovia con un recorrido impresionante que te enseña la ciudad entera y que es lo suficientemente duro como para evitar que nadie busque marca.
Me desagradó mucho no ver la alfombrilla de tiempos en la salida. No la pido en puntos intermedios, que con un precio de 16 euros no sería descabellado, pero en la salida... La bolsa del corredor es muy mejorable. Yo no pido una bolsa cara pero si original; por ejemplo me ha encantado que nos regalen unas alubias de la tierra (original y barato), pero la sudadera del corte inglés es propia de "Cuéntame como pasó", va directa al garaje. Hay mil complementos de running distintos de la tipica camiseta (que ya no caben máas) que deberían empezar a aparecer en las bolsas.
El viaje en Ave inmejorable, para un dia que será inolvidable, el dia en el que espero dejar definitivamente atras un año pasado de dolores y lesiones, para volver exprimirme en cada entreno y cada carrera. La sensación es indescrptible, creo que me dará mucha moral para lo que queda hasta Zaragoza.
Lo que parece claro es que no vamos a correr en Alcazar, el domingo nos dimos caña y  ahora preferimos centrarnos en el entrenamiento. De momento esta semana hay que asumir la paliza del domingo y a partir de la semana que viene volver a zumbarle. Quizá nos probemos en Villaverde o en la media de Leganés, para las cuales tenemos un mes casi por delante para mejorar.
También correremos La Ciencia, que a pesar de ser un 10.000 cambiaremos por el dia de series, y nos servirá para ver la chispa de velocidad poco antes de Zaragoza.
Saludos. Mario

miércoles, 15 de septiembre de 2010

Zaragoza 2010


Al igual que el año pasado, este otoño correremos el segundo Maratón del año. De momento nuestra idea es ir conociendo los maratones patrios antes de probar con los grandes. El año pasado fue Bilbao en su primera edición nocturna la que vió a Javier bajar de las cuatro horas y a mi arrastrarme consiguiendo mi PMP (Peor Marca Personal); las razones las teneis en sendas entradas.
Nuestras raíces maternas influyeron en la elección de Bilbao, descartando Ciudad Real, que por raíces paternas era la otra candidata. Este año todo hacía presagiar que sería Ciudad Real la elegida. Pero le salió una dura competidora que coincidía en fechas. Tras descartar San Sebastián por ser demasiado tarde y por miedo al clima, nos fijamos en Zaragoza. Analizando las anteriores ediciones Zaragoza gana por goleada en cuanto a participantes, y eso para unos corredores-trotadores como nosotros, que nos movemos en la parte trasera del pelotón es muy importante. En Ciudad Real la participación es menor y de gran nivel, por lo que lo dejaremos para cuando podamos movernos entre las 3:30 y las 3:45, algo que Javier conseguirá en breve y que a mi me costará una eternidad.
Una vez decidido Zaragoza, tocaba plantearse un reto que nos obligara a entrenarlo en condiciones. Yo voy dispuesto a bajar de las 4 horas de una vez y Javier a acercarse a las 3:40 lo más posible.
De momento las lesiones nos respetan. También vendrá Julian.
En agosto hemos rodado siguiendo más o menos un plan de entrenamiento de Runners. En Septiembre ya le estamos dando a las series, y a mi la verdad es que me gustan bastante (debe ser la prueba de que las hagolentas y mal).
Este domingo tenemos un primer test en la media de valladolid y dentro de tres semanas iremos a Alcazar de San Juan, para la media de allí. En Valladolid intentaré bajar de una vez de 1:50 y según se dé, en Alcazar iré a reventar.

Este verano Javier me ha traido unas zapas nuevas, las Nike Vomero 4, por 50 dolares. Si las Brooks eran blandas, lo de estas zapas, parece una broma; parece que andas en una colchoneta. Esto para mí que paso de los 80 kilos es esencial. Desde que las uso me ha desaparecido un dolor que siempre me aparecia despues de entrenar en la cadera. De momento no me las quito, pero la idea es alternar entre una y otra.
Bueno estamos enchufados, así que esperemos que los dolores nos respeten.