ZARAGOZA 2010 4º MARATÓN

Dicen que la experiencia es un grado. Si he teminado este maratón (el cuarto) ha sido por eso. En Bilbao (2º maratón) aprendí a sufrir... a sufrir de verdad. Mapoma 2010 (3er Maratón) lo preparé con dolores continuos que unido a un objetivo excesivamente ambicioso (sub 4h) y a un calor serio,me puso un muro tremendo en el km 30 aproximadamente. Zaragoza se presentaba de otra manera. La mejor preparación con tres tiradas de 30 km y un medio maratón (Valladolid) 5 semanas antes en el que había mejorado mi marca en 6 minutos, me hacían ser otimistas. Los últimos 15 dias he tenido que para por una contractura muy dolorosa en el gemelo derecho. Pero no debía ser excusa. El perfil era plano y además podría salir con Javi y Julián, lo cual hace más entretenido el esfuerzo.


En este maratón lo habíamos planeado todo minuciosamente: Ave el sábado prontito, con la vuelta el domingo casi a las 18h. Hotel oficial a 100m de salida y meta y con late check out a las 15:00h. Pero siempre se aprende algo nuevo y yo aprendí a que no debes cebarte en exceso antes de un maratón si no lo haces habitualmente. Comimos pasta, siesta y de nuevo pasta en la cena me llevron a la cama con un insomnio provovado por una digestión brutal a la que no tengo habituado al cuerpo. Para más inri a las 6:30 intentamos desayunar algo. A las 8:30 salíamos del hotel y nos encontramos con un cielo despejado y 13 grados de temperatura, inmejorable.

La idea era salir los 3 a 5:30 e ir viendo como nos encontrábamos. Los objetivos: Javier mejorar sus 3:52 de mapoma 2010, Julián acabar rondando las 4 h para desquitarse de su lesión en su estreno del pasado Mapoma; En mi caso quería bajar de una vez de las 4h y para ello, en contra de los cánones que te indican correr en progresivo, prefería llegar a los 30 km en 5:30 y luego reducir el ritmo teniendo asegurado el objetivo.

Los 5 primeros km cayeron unos segundos por debajo del objetivo; llamaba la atención que a pesar del ritmo, eramos prácticamente los últimos. El globo de las 4h iba lanzado... Yo ya tuve un primer aviso al ver que las pulsaciones se movían por encima de las 160ppm, lo cual era muy alto para estar empezando. Hasta el km 15 seguíamos por el centro y iba viendo como mis pulsaciones se acercaban peligrosamente a las 170 ppm. Javi se marchó en el km 10 pero estuvimos viendole casi hasta el 20. Quizá en estos km debí tomar la decisión de aplacar el ritmo bajando incluso a los 5:50 y si tuviera que tomar la decisión ahora lo haría sin dudar. Sin embargo la experiencia de la media de Valladolid, donde me tiré cuchillo y no reventé en ningún momento a pesar de ir en el alambre, me hacía creer que aguantaría hasta el 30...quizá 25 y luego regularía.

Llegando al 20 Julián me propuso regular aflojando hasta el 30 y luego valorar la situación; pero yo ni caso, le dije que mejor lo hiciéramos en el 25. Pasamos la media en 1:57, ahí tuve el primer bajón, pero lo achaqué a una cuesta y no le dí importancia. Los siguientes km rodean la expo en una zona muy desprotegida donde el cierzo soplaba en condiciones; es un carril ici que bordea el rio durante unos 4 km. Aquí Julián tuvo su bajón y yo , de nuevo, en lugar de regular, seguí lanzado. Quería llegar cuanto antes al km 30-32...pero se haría más largo de lo que pensaba. Llegué al 25 con un grupo en el que rodábamos sobre los 5:45 y a mi me costaba mantener el ritmo, temía descolgarme y hundirme, estaba seguro de que tarde o temprano recuperaría. En el km 28 entrábamos

en la Expo, donde daríamos vueltas durante casi 8 km y donde viviría un auténtico calvario. Ya en avituallamiento del 30, al que llegué con un Julián recuperado, me paré a beber y comer. Decidí, tras comentarlo con Julián, dejar el gel que me quedaba (el otro lo tomé en el km 21) para el km 32 o incluso el km 35. Sin embargo aquí me pegó el primer pajarón, Julián siguió hacia delante y yo, esta vez acertadamente, decidí regular hasta recuperarme. Lo primero que hice fue tomarme el gel, pero me quedé solo y eso hace muy dificil mantener un ritmo. Julián poco a poco de marchaba y yo me movía solo con un viento terrible a ritmos de 6:30 o superiores. Así pasé los siguientes 7 u 8 km. Hasta que enfilamos la vuelta al centro, no volvía recuperar el ritmo; me unía dos corredores

de un club catalán y poco a poco volvía ver a Julián y a acercarme poco a poco. Esta vez el terreno era favorable y se veía el final. Yo iba roto, pero era capaz de rodar a un ritmo decente, siempre superior a 6 min pero decente, dada mi condición física en ese momento. Cogí a Julián cerca del km 37 y en el 39, cruzando el último puente hacia el centro de la ciudad le dejé. El último km fué espectacular, entraba solo, con la calle llena de gente animando...una pasada, así que incrementé el ritmo para adecentar algo el trote. En ese momento me pegó un tirón el gemelo izquierdo, algo completamente nuevo para mí, que me devolvió a mi trote cochinero. Si paraba en ese momento echaba a perder todos mis cálculos para mejorar mi marca de 4:12, así que me olvidé de todo y traté de

llegar a meta decentemente. Al final 4:10:59 netos, mi mmp (mejor marca personal) pero muy por debajo de cualquier previsión previa. El trato en meta fue como en todo el maratón, increíble. La labor de los voluntarios en este maratón es digana de enmarcar. Te hacen sentir, de verdad especial; seguamente influye que somos menos que en Madrid, pero también fue así en Bilbao y el trato fue penoso (de la organzación,claro).

Con el hotel a 200 metros de meta, enseguida estabamos en la ducha y aún nos quedaba una hora para descansar en la cama, antes de dejar la habitación sobre las 3 para ir a comer. Tras una comida ligera (el cuerpo no pedía tralla) fuimos a la estación del Ave para poder ver a Alonso antes de oger el tren de vuelta.

En definitiva, un fin de semana redondo. Otro maratón acabado, mejorando marca y aunque mi espectativa era mucho mayor, ya habrá tiempo de reventar el crono. Como siempre acabé el maratón diciendo que no volvería a correr otro, pero ya en el tren de vuelta estabamos planeando los dos maratones del 2011. A dia de hoy parece seguro que correremos BERLIN en Octubre y MAPOMA en Abril, pero esos planes merecen una entrada nueva. Ahora toca descansar y planificar la nueva temporada que como todas tendrá el Trofeo Akiles, San Silvestre y Paris como carreras de 10 km antes de empezar con las medias madrileñas en Getafe.

La conclusión es que le había perdido el respeto a la maratona, y ella solita me ha puesto en mi sitio. Espero haber aprendido.

Un saludo

Media Maratón de Valladolid 2010

Como tantas otras veces, me presentaba en la linea de salida con la confianza de que hoy sería mi dia. Bajaría de 1:50 sin aparente esfuerzo. Quizás esta vez el entrenamiento está siendo el más serio de todos, con tiradas largas o muy largas y siempre a ritmo (debajo de 6 min el km) y con mucha pista, repeticiones a ritmos entre 4:45 y 4:35 con distacias de entre 1600 y 2000 m.
Decidí salir con Javier a ritmo de 5min el km. Ya lo intenté en La Latina y el porrazo fue brutal. Sin embargo esta vez las sensaciones eran distintas. No iba sobrado, pero tampoco necesitaba frenarme ibamos tranquilamente con unos segundos de margen. Yo esperaba el km 10 deseoso para saber como estaba, pero las sensaciones en el km 6 (supongo que había calentado ya) eran tan buenas que empezaba a creermelo. En cada avituallamiento mordía media pastillita de glucosa (dextro) y parecí que funcionaba todo bien. Ir con Javier me ayudaba mucho para que el ritmo no decaiera. Pasamos el km 10 en 50:50 y es que el gps ya nos indicaba que llevábamos unos 200 metros más de lo que marca la carrera, lo cual es normal ya que nunca haces el recorrido exacto de la medición. Estos km pasaron muy rápidos a pesar de que los picábamos entre 5:05 y 5:10; a partir del km 14 aumentamos el ritmo a 4:50, yo flipaba. Pensaba que en cualquier momento llegaría la fatiga general, la flojera...un pajarón....pero nada de nada. Ibamos adelantando a la gente y empezaba a ser consciente de que iba a rebajar mi marca un montón acercándome a 1:45. En el km 17 Javi me dice que va a apretar hasta 4:30 el km, yo me acojono y me quedo, prefiero amarrar lo conseguido. Javi va poco a poco alejándose. Yo aprieto y consigo que no se marche mucho. Sobre el km 18 había un avituallamiento, donde decido beber y tomar más glucosa, y aquí Javi se aleja bastante. Vuelvo a coger el ritmo y voy marcando siempre por debajo de 5 el km. A esas alturas no paro de adelantar a gente, y eso me hace pensar que voy aún más rápido. El útimo km me lanzo de cabeza y  a pesar de tener el unico repechito de la carrera vuelvo a picar el km por debajo de 5. La entrada en meta la hago esprintando, viendo en el crono que no sería sub 1:45 pero si sub 1:46. Al final 1:45:53. Impresionante. No acabo nada reventado (comparándolo con cualquier otra media) pero sobre todo me sorprende lo rápido que me recupero, en apenas unos minutos me encuentro genial (dentro de un orden y siempre comparando con otras medias en las que acabo roto).
Esta ha sido sin duda mi mejor carrera. Javi entro un minuto antes que yo y Julián acabó en 1:51 también con grandes sensaciones y corriendo de menos a más.
Las causas son claras, entrenar con ritmos controlados siempre y metiendo tiradas muy largas (dos de 30 km) han dado su fruto. Las sensaciones en carreras eran muy similares a las de los entrenamientos en pista. Esto supone un respaldo total al plan que estams siguiendo Julián y yo, y me anima a seguir más fuerte aún.
En el plan corro 4 dias a la semana, de los cuales uno es de tirada larga (entre 20 y 30 km) por debajo de 6 min el km, y otro de series de entre 1600 y 2000 m  (unas 4 o 5 repeticiones con recuperaciones al trote entre 200 y 400 metros); los otros dos dias, uno vuelvo a la pista y hago entre 5 y 8 km a ritmo inferior a 5 min el km, con calentamiento y enfriamiento al final; el cuarto dia es una salida al trote de entre 6 y 8 km a ritmo en torno a 5:45 (este es el dia que sacrifico, si no tengo más remedio).
La carrera era perfecta para hacer marca. El clima era inmejorable y el recorrido plano. Dimos tres vueltas, una pequeña y dos grandes. Eso ayuda porque sabes lo que viene al final, a pesar de que pueda parecer monótona, en mi opinión si tu objetivo es correr mucho es lo mejor. Si quieres correr algo menos quizá sea preferible no repetir recorrido y así conoces más zonas de la ciudad. Pero para eso recomiendo correr Segovia con un recorrido impresionante que te enseña la ciudad entera y que es lo suficientemente duro como para evitar que nadie busque marca.
Me desagradó mucho no ver la alfombrilla de tiempos en la salida. No la pido en puntos intermedios, que con un precio de 16 euros no sería descabellado, pero en la salida... La bolsa del corredor es muy mejorable. Yo no pido una bolsa cara pero si original; por ejemplo me ha encantado que nos regalen unas alubias de la tierra (original y barato), pero la sudadera del corte inglés es propia de "Cuéntame como pasó", va directa al garaje. Hay mil complementos de running distintos de la tipica camiseta (que ya no caben máas) que deberían empezar a aparecer en las bolsas.

El viaje en Ave inmejorable, para un dia que será inolvidable, el dia en el que espero dejar definitivamente atras un año pasado de dolores y lesiones, para volver exprimirme en cada entreno y cada carrera. La sensación es indescrptible, creo que me dará mucha moral para lo que queda hasta Zaragoza.
Lo que parece claro es que no vamos a correr en Alcazar, el domingo nos dimos caña y  ahora preferimos centrarnos en el entrenamiento. De momento esta semana hay que asumir la paliza del domingo y a partir de la semana que viene volver a zumbarle. Quizá nos probemos en Villaverde o en la media de Leganés, para las cuales tenemos un mes casi por delante para mejorar.

También correremos La Ciencia, que a pesar de ser un 10.000 cambiaremos por el dia de series, y nos servirá para ver la chispa de velocidad poco antes de Zaragoza.
Saludos. Mario

Zaragoza 2010

Al igual que el año pasado, este otoño correremos el segundo Maratón del año. De momento nuestra idea es ir conociendo los maratones patrios antes de probar con los grandes. El año pasado fue Bilbao en su primera edición nocturna la que vió a Javier bajar de las cuatro horas y a mi arrastrarme consiguiendo mi PMP (Peor Marca Personal); las razones las teneis en sendas entradas.
Nuestras raíces maternas influyeron en la elección de Bilbao, descartando Ciudad Real, que por raíces paternas era la otra candidata. Este año todo hacía presagiar que sería Ciudad Real la elegida. Pero le salió una dura competidora que coincidía en fechas. Tras descartar San Sebastián por ser demasiado tarde y por miedo al clima, nos fijamos en Zaragoza. Analizando las anteriores ediciones Zaragoza gana por goleada en cuanto a participantes, y eso para unos corredores-trotadores como nosotros, que nos movemos en la parte trasera del pelotón es muy importante. En Ciudad Real la participación es menor y de gran nivel, por lo que lo dejaremos para cuando podamos movernos entre las 3:30 y las 3:45, algo que Javier conseguirá en breve y que a mi me costará una eternidad.
Una vez decidido Zaragoza, tocaba plantearse un reto que nos obligara a entrenarlo en condiciones. Yo voy dispuesto a bajar de las 4 horas de una vez y Javier a acercarse a las 3:40 lo más posible.
De momento las lesiones nos respetan. También vendrá Julian.
En agosto hemos rodado siguiendo más o menos un plan de entrenamiento de Runners. En Septiembre ya le estamos dando a las series, y a mi la verdad es que me gustan bastante (debe ser la prueba de que las hagolentas y mal).
Este domingo tenemos un primer test en la media de valladolid y dentro de tres semanas iremos a Alcazar de San Juan, para la media de allí. En Valladolid intentaré bajar de una vez de 1:50 y según se dé, en Alcazar iré a reventar.

Este verano Javier me ha traido unas zapas nuevas, las Nike Vomero 4, por 50 dolares. Si las Brooks eran blandas, lo de estas zapas, parece una broma; parece que andas en una colchoneta. Esto para mí que paso de los 80 kilos es esencial. Desde que las uso me ha desaparecido un dolor que siempre me aparecia despues de entrenar en la cadera. De momento no me las quito, pero la idea es alternar entre una y otra.
Bueno estamos enchufados, así que esperemos que los dolores nos respeten.

MAPOMA 2010 -

Tras una temporada complicada, confusa, en la que he estado más pendiente de correr sin lesionarme que de mejorar, me plantaba en la salida de mi tercer maratón con 5 medias (Getafe, Fuencarral, Latina, Segovia y Madrid). Desde Segovia los dolores habían vuelto, esta vez en la rodilla derecha. Fisio y mucho cuidado. Las últimas semanas salía con mucho cuidado, la media de Madrid (1:54) la hice con dolor serio. Desde ahí fisio, algún trote tranqui y mucha natación. La última semana de parón total.
Así repetimos la mañana del año pasado, levantándome a las 6, desayunando mis cereales con plátano, baño, duchita vaselina y a buscar a Javier. Aparcamos y nos reunimos con Julian y Mariano, compañeros míos de trabajo.

Con Julián por el centro

Javier intentaría un ritmo medio de 5:15 para moverse sobre las 3h:40 min. Mi idea sería intentar bajar de 4 horas. Para eso llevaría un ritmo de 5:40 compartido con Julian, hasta la media (luego vería) y con Mariano, que se prueba en la distancia, pero que a ese ritmo iria sobrado.

Javi entrando en la Casa de Campo

Empezamos algo más fuerte con ritmos más cercanos a 5:30 y poco a poco lo fuimos ajustando para pasar los 10 km sobre los 57 minutos. Ibamos bien, frenándonos, pero el calor se volvía preocupante. Bebíamos mucho y por consiguiente, parabamos en exceso. El ambiente en Sol, como siempre perfecto. Por ahí nos esperaba la hija de Julián a la que pedí reflex para mi rodilla, y me sorprendió ver que julian se embadurnaba la rodilla derecha, en lo que a la postre se convertiría en su  pesadilla.
Al pasar la media, me di cuenta de que el reloj indicaba 300 metros más de los reales. Eso suponía pasar la media con un minuto de diferencia. Como llegaba terreno favorable, nos dispusimos a recuperarlo bajando el parque del oeste, pero Julián pidió quedarse a su ritmo. Mariano y yo bajamos a 5:15 y en un par de km habíamos recuperado ese minuto.

Yo saliendo de la Casa de Campo

Llegaba la casa de Campo. Los 5 primeros km son de falso llano, sin apenas sombra, ambiente árido. Puse el gancho con Mariano y lo atravesamos con varios km cercanos a 6 minutos el km. Duro, muy duro. Al llegar al km 30 sabía que durante 5 km habría más bajada que subida, pero ya fui consciente de que iba en reserva, no bajaría de 4 horas. Para colmo, paradita tecnica y pierdo a Mariano, al que ya no vería más. La bajada del paseo de Extremadura fue la última vez en la que me sentí bien. A partir de ahí, las piernas no iban, el calor era asfixiante. Comenzaba a sufrir, mucho. En la avenida de la Virgen del Puerto.... me pegó fuerte el tio del mazo, no iba, me apetecía mucho pararme a andar. La subida por la calle Segovia, fué tremenda. Pero arriba ví a la hija de Julian a la que volvía a pedir reflex. Esta paradilla, me dio el resuello necesario para afrontar con más ánimo lo que quedaba. Volvía ritmos de 6 minutos y veía que quedaban ya pocos km. Había pasado lo peor, o eso creía. La avenida de las Acacias, me gusta porque divisas el edificio del ministerio de agricultura (frente a Atocha) desde el principio, y eso me animó mucho. Iba muerto, pero iba. Al llegar a Atocha sabía que lo tenía, que no se escapaba, pero el principio de Alfonso XIII de nuevo sufrí mucho. Casi me paro a andar, fue tremendo. El ejemplo es que cuando entré en el Retiro y ví que quedaba más de un km por el parque, quise morir; no disfruté nada de la llegada. Me daba igual el tiempo, solo quería pararme....bueno lo cierto es que en el último momento me fijé en que nadie tapara mi entrada, por aquello de que la foto en meta, fuera lo más digna posible; este detalle me hace pensar que tampoco iba tan rematadamente mal. Hice meta en 4h 12 minutos, mejorando en más de 6 minutos mi tiempo del año pasado, pero ridiculizando mi idea de bajar de las 4h.
La primera conclusión es que no me dolió nada lo suficiente como para que influyera en mi tiempo. Esto era lo primero que hubiera pedido a la salida, saber mi estado de forma sin dolores. Creo que el calor si ha podido penalizar en algo mi tiempo, pero me hidraté bien, así que como mucho pudo empeorarlo en 2 o 3 minutos.
En definitiva, creo que mi forma ha mejorado algo a la del año pasado. Pero sobre todo creo que cada vez me conozco mejor y eso sin duda me ha servido para no lesionarme en una temporada que empezaba predestinada a ello por los continuos dolores. Tambien he notado que recupero mucho mejor.
De momento la idea es correr un maraton de otoño, plano en España donde poder pelear la marca. Madrid debe convertirse en un Maratón para disfrutar y no para pelearse con el crono, ya que es muy duro.
Voy a para más de la cuenta. Casi un mes. Me centraré en la bici y la natación.
Espero volver en la Liberty, sin ambiciones, como punto de partida de la preparación del nuevo maratón. Y hasta Agosto me dedicaré a fortalecer piernas: mucha cuesta y si puede ser gimnasio o gomas. Pero quiero hacer una buena base de cara al nuevo plan que empezaré en vacaciones.
Estoy feliz, llevo año y medio corriendo y en el último año han caido tres maratones.

Media Maratón de La Latina 2010

Anunciaban la Tormenta Perfecta, pero salió un dia perfecto para correr. El adelanto de la hora de las 10 a las 9 se notaba y más aún cuando la noche antes estuve de cena con amigos y cayó alguna copilla.

Saliendo de la CdC, pegadito a la dcha de la carretera.

Empecé con Javier con la idea de mantener la media de 5 minutos el km hasta el km 12 donde la carrera empieza a subir casi sin descanso hasta la meta. Lo aguanté no sin esfuerzo, de hecho el km 9, en el que hay el principal o único repecho de la primera mitad lo hice en 5:50, el resto por debajo de 5min/km. En el km 12 ya estaba solo, lo pasé en 61 minutos, pero sabiendo que iba pasadísimo. A partir de ahí, todo subida, piqué la mayoría de los km en 5:45. Acabé en 1:53:17 con 172ppm. Peor que el año pasado que entré en meta 14 segundos antes, coniguales pulsaciones. En ese momento me daba igual, como casi siempre que acabo una carrera, lo que me importa es haber disfrutado y acabar sin dolores.
Las conclusiones las saqué al dia siguiente. Este año peso 4 kilos más que el año pasado, y con este peso (83,5kg) ni mejoraré ni remitirán los dolores. No podré correr dos dias seguidos y lo peor es que no disfruto de las tiradas largas como antes.

Sin comentaios sobre el estilo...Ah! soy el de las medias blancas ¡eh!

Así que me he puesto a dieta. De momento llevo 2 dias y bien. También he empezado a nadar hoy. Me he apuntado a nadar cerca del trabajo los martes y jueves al mediodía; hoy he cumplido (700m combinando croll y braza, he acabado hasta mareado). No me pongo otro objetivo que el de perder esos cuatro kilos; si luego caen más, mejor que mejor.
en 15 dias corro en Segovia y a pesar del perfil seguiré peleando por bajar de 1:50:00. De momento la meta es llegar a Segovia con menos peso y sin fallar en la piscina; en salir a correr sé que no fallaré.

Nuevas Zapas

Mis primeras zapatillas fueron unas adidas buenas. No sé el modelo, pero me costaron una pasta, no obstante, todavía no estaba enganchado al correr. Cuando empecé hace casi año y medio me compré unas Scott ride 3; muy estables. Luego las cambié por las adidas Adistar hace un año con las que me regalaron la inscripción a Mapoma. Mejoraba lo anterior. Tras el verano me compré las NB 1063, estas zapas son espectaculares; la amortiguación trasera y la suavidad de los materiales me tenían enamorado. Ahora, antes de cambiar consulté al master de estas cosas, Ulrich, experto de material en la web de Runners World. Me recomienda las 1064, las brooks glycerin y las Saucony Triumph 7. Primero y muy a mi pesar, descarté las 1064; no me las quise ni probar por miedo a llevármelas; quería conocer nuevas marcas. La decisión estaría entre Brooks y Saucony...y fue fácil. La brooks vale casi 30 euros más baratas....alucinante. Si a esto le añadimos la querencia que le intuyo a Ulrich por todo lo que hace Brooks, al decisión era fácil
Así que cayeron las Brooks.

Las primeras impresiones son buenas...no tan radicales como las NB. Sólo las mejoran, de momemnto en la amortiguación delantera. Las he probado en el tartán, en asfalto y en la Casa de Campo. Me ha llamado la atención lo bien que sujetan el pié en terreno inestable (CDC).
Serán las encargadas de cruzar la meta de Mapoma y de hacerme olvidar las NB, por lo menos de momento.

NUEVA TEMPORADA - NUEVAS SENSACIONES

Llevo desde Bilbao buscando una buena excusa para volver a escribir aquí. Lo cierto es que la vuelta ha sido dura; los ritmos eran tremendamente lentos y en cuanto forzaba se resentía mi gemelo y eso ocasionaba que parara unos dias. Así estuve Octubre y parte de Diciembre. Corrí la San Silvestre en 49 minutos, con muy buenas sensaciones a pesar del tremendo tiempo que hacía. Estas sensaciones se confirmaron en el trofeo Paris donde rebajé a 48:48. En ambas carreras no sufrí en exceso, quizá por eso no hice mejor marca, pero creo que cada vez me conozco mejor y se regular mis fuerzas.
Enero continuó muy bien, entrenando un día si y otro no, hasta el dia 24 que corrí la media de Getafe. Día fantástico que empecé reservón y fuí a más. Acabé la media a tope y fué un placer. Al final 1:51:55. Casi tres minutos mejor que el año pasado con 170 ppm frente a las 180 del año pasado (era mi primera media). Las sensaciones de las carreras de 10 km se confirmaban. Me da la sensación, quizá por exceso de prudencia, que controlo mis fuerzas mejor que nunca y que disfruto de las carreras más. Sin las antiguas agonías.
Seguí entrenando regularmente hasta FuencarralEl Pardo. Esta carrera no la pensaba correr porque tenía un importante bautizo la tarde anterior con celebración nocturna entre amigos. Al final me pasé todo el bautizo pensando en la carrera. A pesar de las cervezas y de tomarme tres o cuatro copillas, al haber empezado pronto el fiesteo, a la 1:30, aprovechando la marcha de unos amigos, nos fugamos con ellos. Y claro en cuanto llegué a casa, preparé la ropa y mandé un mensaje a Javi diciendole que correría.
La mañana siguiente demostré que estaba enganchado a esto de correr ya que madrugué y me planté en la linea de salida con 4 grados bajo cero y un recorrido por delante para temblar. Decidí salir con Julian y rodar entre 5 y 5:15. La verdad es que quizá por el ritmo, pero me sentí genial. Lo cierto es que estaba tremendamente orgulloso de mí mismo por estar ahí en la salida....con dos cojones. Los primero 12 km que son muy favorables los pasé sin problema pensando que en cualquier momento me resentiría. Llegaron las cuestas y con alguna ayuda de Julián conseguí aguantar. Volví a acabar lanzado a pesar del perfil. Acabé casi con el mismo tiempo que el año pasado. Se confirmaban las sensaciones, esto marcha.
Estos días he intentado incrementar el entrenamiento juntando dos días seguidos, pero no ha salido bien. Me sobrecargo mucho, así que seguiré como hasta ahora un dia de entreno un dia de descanso. Sólo si bajo de peso seriamente podré incrementar más los entrenamientos. Y solo de esa forma podré aspirar a correr con Javier que está en otro mundo corriendo medias como la de Fuencarral en 1:41.....incontestable.....pero que lo cuente él si quiere.
Este domingo corremos en La Latina. Voy a intentar meter una marcha más con la ayuda de Javi e intentar bajar de 1:50, en una carrera que tiene un perfil complicado pero un recorrido precioso.
En marzo corro con Julián en Segovia y en Abril la media de Madrid nos dará un test sobre lo que podré hacer en Mapoma. Mi objetivo es bajar de 4 horas en el Maratón, pero todo dependerá de estos dos meses.

Ya estamos de vuelta....saludos